Hoy en día estamos tan acostumbrados a ser asaltados por banners, anuncios en la prensa digital, botones que prometen que si haces clic en ellos obtendrás una cosa u otra, que nuestro cerebro es ya capaz de reconocer a estos pequeños intrusos visuales tan rápido que nos hemos convertido en auténticos expertos en detectar la manera de cerrarlos y obviarlos casi a la velocidad de la luz. Esto es debido a que lo que el usuario quiere es que no le molestes, llegar, ver el contenido que le interesa e irse.
Por eso, si vas a diseñar un call to action, hay algunos puntos que debes tener en cuenta para que tu llamada a acción funcione.
1. Focaliza a tu público objetivo
Como ya comentamos en el post sobre qué es el Inbound Marketing, no se trata de lanzar una oferta y esperar a que alguien la vea. Por el contrario, lo que éste defiende es que ofrezcas a tus usuarios un contenido de valor y específico para cada persona a la que te quieras dirigir. Cuanto más segmentes, más efectividad tendrá y por lo tanto mayor atracción, lo que se traduce en una mayor conversión.
Diseña tus llamadas a la acción en función de si van dirigidas a visitantes, leads o clientes. Para ello, debes conocer más acerca de cómo son tus buyer personas. A continuación, te mostramos ejemplos de cómo diseñarlas para cada una de ellas.
Para visitantes.
El objetivo de estos call to action es generar más visitas a tu web. Para ello, debes generar una oferta que sea atractiva para un público que aún no conoce bien tu negocio pero que necesita ideas y contenidos accionables.
Para leads
Este tipo de público es más especializado, ya sabe lo que quiere y lo que busca, por lo que debes ofrecerle un contenido que le aporte más valor y que le convenza de que tus servicios son los mejores para él. El mensaje debe explicarle claramente cuáles son los beneficios que conseguirá al descargarse tu oferta.
Para clientes
Este tipo de público ya te conoce bien, sabe que le das siempre lo que quiere y está ya preparado para que le hagas una oferta por la que deberá pagar. A este público puedes ofrecerle, por ejemplo, un seminario.
2. Crea un buen copy
A veces caemos en el error de centrarnos más en el diseño que en lo que en él queremos comunicar. No debemos olvidar que un call to action no sirve de nada si la oferta que en él quieres hacer no está bien clara o si el diseño impera por encima del copy, relevando a este a un segundo lugar.
El director de Meclabs dice que:
Mantén el tono de tu mensaje acorde a las características de cada público objetivo.“La claridad triunfa sobre la persuasión” Tuitea esto
3. Incluye números
Los números muestran al usuario exactamente lo que van a conseguir (por ejemplo, un precio rebajado sobre el precio anterior). Es una manera de ganar credibilidad ante el usuario y es una técnica que funciona muy bien también para títulos de posts, encabezados o asuntos de mail.
Añade el número de páginas del whitepaper que estás ofreciendo, menciona un descuento especial o haz una lista numérica del impacto o el beneficio que obtendrá el usuario con tu recurso.
4. Crea un diseño acorde a tu guía de estilo
A veces queremos ser originales en nuestros CTA y caemos en el error de llenarlos de colores y elementos, creyendo que esta será la manera más efectiva de llamar la atención de nuestros usuarios. Sin embargo, es importante que mantengan una coherencia visual con todo el resto de la página, puesto que es una manera de hacerlos inherentes a tu marca y fácilmente reconocibles. Utiliza tu tipografía y colores corporativos y mantén el mismo tono en tus copies que el que utilizas en tu sitio web.
Puedes jugar con los pesos y tamaños de tus tipografías para resaltar lo más importante, así como utilizar gráficos o alguna imagen del producto que estás ofertando (si es que dispones de ella).
Te dejamos algunos ejemplos de Impact de 15 call to actions para que te inspires.
5. Distribuye bien los elementos en el espacio de tu CTA
Si bien es cierto que el espacio con el que contamos no es demasiado grande, debemos ser inteligentes y saber distribuir lo espacios adecuadamente para conseguir una armonía visual.
Una distribución correcta sería, por ejemplo, dejar ⅓ a la izquierda para la imagen del recurso en concreto que estás ofreciendo. Los otros ⅔ para tu copy y debajo de este un botón que llame a la acción.
6. Sitúalo en el lugar correcto
¿A quién le gusta entrar en una tienda y que en la entrada alguien le asalte ofreciéndole un producto que no sabe ni siquiera si necesita? ¿A nadie, verdad? Pues en este caso debes mostrar la misma empatía y no invadir al usuario conforme entra en tu sitio web. Primero dale aquello que busca, aquello para lo que ha llegado hasta tu web. Y en una segunda instancia, hazle tu oferta como complemento a lo que ha venido buscando.
Sitúalo debajo de un post, por ejemplo, o en el sidebar si dispones de uno, pero nunca al principio ni entre las líneas de tu post. De esta manera, tu usuario no lo tomará como intrusivo y será más probable que acabe interesándose por él.
Ahora, hazte un checklist con los puntos necesarios a la hora de diseñar tu call to action y no olvides ir tachándolos todos a medida que lo vas creando. Verás cómo gracias a un buen call to action tu ratio de clic aumentará considerablemente.